domingo, 25 de septiembre de 2016

Dando "pedales" por el Valle de Echo, Oza y Guarrinza









El valle de Hecho o Val d'Echo, en fabla aragonesa, es un valle pirenaico situado al norte del río Aragón , fronterizo con Francia y muy cercano a tierras navarras.

Es un destino turístico muy concurrido, dado que es un territorio que aúna, cultura, tradiciones, gastronomía y naturaleza. También es un lugar muy visitado por montañeros, ya que su orografía esta plagada de cimas de una belleza espectacular.




Para mi siempre ha sido uno de mis valles preferidos del Alto Aragón y cuando he querido perderme en solitario por las montañas del Pirineo Aragonés, esta zona ha sido uno de mis elegidas.
Pero esta vez ni voy solo ni calzo mis botas de esquí , ni mis botas montañeras...esta vez voy con mi esposa Eli y calzamos las zapatillas de btt...hemos escogido este lugar para realizar una tranquila y preciosa ruta de bicicleta.
No hay que decir, que la btt y el cicloturismo, tienen en este rincón , una gran variedad de rutas de dificultad variada. Pero esta vez no buscamos desniveles exagerados, ni sendas trialeras ni mucho menos saturar el cuenta-kilómetros con muchos números. Hemos decidido pasar una jornada tranquila y disfrutando de los paisajes e historia de este precioso valle AltoAragonés.


La ruta elegida, discurre por la parte alta del valle, que es la zona mas salvaje y con un alto valor paisajístico e histórico. La cabecera de la Val d'Echo, la Selva de Oza, el Valle de Guarinza y como colofón el precioso Valle de Aguas Tuertas, lugar de nacimiento del Río Aragón Subordan, curso fluvial que lo recorre enteramente hasta su desembocadura con el Río Aragón en Puente La Reina de Jaca, unos 50 km aguas abajo.
Podemos comenzar la ruta en varios puntos y a pié de coche, todo depende de la planificación de la ruta y el kilometraje a realizar.


Si comenzamos en la población de Echo tendremos aproximadamente unos 25 km que recorrer para llegar al final de la pista de Guarrinza, comienzo de Aguas Tuertas y podremos recorrer íntegramente toda la  cabecera del valle, visitando sus lugares mas emblemáticos.
Visita obligada será Echo, punto inicial y final de la ruta, donde podremos visitar sus estrechas calles empedradas y contemplar las típicas casas alto aragonesas y sus chimeneas adornadas en su parte superior con los "espantabrujas".



Seguiremos remontando el valle por la carretera local HU-V-2132 y un par de kilómetros arriba llegamos a la población de Siresa o mejor dicho Ciresa , en lengua aragonesa. Lugar cargado de historia Aragonesa y donde se encuentra el Monasterio de San Pedro de Ciresa del Siglo XII, famoso porque en este monasterio se educó Alfonso, que una vez se convirtió en rey de Aragón (con el nombre de Alfonso I el Batallador) .
Seguimos dando pedales y a unos 5 km de aquí nos encontramos el Puente de Santa Ana  y  un desvío a la derecha, esta pista nos conduciría hasta el Refugio de Gabardito , que se encuentra a unos 500 m por encima de nosotros.
Continuando por la carretera , a 500 m topamos con  el Centro de Interpretación del Megalitismo Pirenaico y de la Val d'Echo, lugar de que da a conocer unos de los fenómenos presentes en el valle, el Megalitisno.Y un kilómetro mas arriba llegamos a uno de los lugares mas emblemáticos del valle, la Boca del Infierno. Estrecho desfiladero donde parece que no hay sitio para que convivan el río, la roca y ...la carretera. Pasado el túnel, merece la pena parar y asomarse al barranco donde el río embravecido lucha contra la roca y las estrecheces el cañón. 



Un kilómetro y medio mas arriba llegamos al campamento  San Juan de Dios , con un aparcamiento donde podemos dejar el vehículo si queremos comenzar la ruta en este lugar. También aquí se se incorpora a la carretera el sendero GR 11.1 y el GR 65.3.3,para cruzar el río y seguir trazado por la otra vertiente orográfica. 
Estas rutas comparten recorrido con la antigua calzada romana que bajando del Puerto del Palo, allá por Guarinza, atravesaba el Pirineo por este sector. Todavía se pude apreciar su trazado y se conserva una antigua torre de vigilancia romana.




La estrecha carretera continua remontando el desfiladero que forma el rio y dejamos a mano derecha el Puen d'Ysil.



Llegamos a la Selva de Oza, donde el valle se ensancha y cambiamos de margen gracias a un puente.
Estamos a los pies de dos colosos de la zona, a nuestra izquierda, observamos los contrafuertes de la Sierra d'Alano, con el Peñaforca 2.391 m , como pico dominante. Al lado opuesto y a modo de fortaleza que defiende el valle, el Castillo d'Acher  con 2.384 m.  en su punta Norte, la mas alta. 
Esta montaña, con su curiosa forma y sus llamativos cambio de color, es una bonita ascensión que nos depara una sorpresa al remontar uno de los pocos pasos que tienen sus escarpadas laderas y llegar a su cima...









En el precioso paraje de la Selva de Oza, podemos observar  una gran masa forestal formada por hayedos y abetos, que dan cobijo a una variada fauna salvaje y flora exuberante. Este lugar es uno de los pocos espacios en el Pirineo, donde el oso todavía hace acto de presencia. Antiguamente los bosques de la Selva de Oza, llegaban cerca de las cumbres y cubrían toda Oza y Guarrinza y era uno de los mas grandes hayedos europeos. La tala indiscriminada para obtener terrenos de pasto y la explotación maderera, los dejaron tal y como lo encontramos hoy en día. No obstante, sigue siendo uno de los bosques mas grandes y bonitos del Pirineo.


Es un lugar muy concurrido en época veraniega y fines de semana y se está re-acondicionando el antiguo camping que hay en este lugar. También podemos tomar algo en el Bar Cafetería Costeros, regentado por mis amigos Luis y Pilar, que tienen un excelente servicio de comidas.
En un costado del camping podemos visitar el Dolmen del Camping y unos metros mas arriba el del Campamento Ramiro I, que juntamente con los restos hallados en la zona conocida como la Corona de los Muertos, forman parte de los monumentos megalíticos de la zona.





Seguimos pedaleando y ganando metros al valle, el firme de la calzada se va deteriorando y a poco mas de dos kilómetros, el valle, se abre por fin, el asfalto se acaba y entramos en el valle de Guarinza.
Hemos dado un giro de 90º y ahora tomamos dirección  este. A nuestra izquierda dejamos un desvío que por la margen derecha del río , se dirige a un centro ganadero y acaba en el antiguo cuartel militar de la Mina, del que hoy en día solo queda un barrancón.




El valle de divide en dos ramales , el que nosotros remontaremos hasta el Achar de Aguas Tuertas y el que se enfila hacia en norte buscando el Puerto de Acherito... y en medio, el barranco de las Foyas que sube directo hacia el Puerto del Palo.
Nos rodean las máximas alturas de la zona, El Chipeta, Petraficha y Quimboas, Anzotiello, Mallo Acherito y el Sobarcal cerrando el valle por el oeste. El Pico de la Ralla o Laraille, Lariste , la Peña del Rincon  y todo el largo cordal que con el Pico Royo, el d'Aillary, Arlet, acaba el el Acué, por el norte. Y el impresionante Castillo de Acher, Costatiza y Secús, estos ultimo formando parte de la Sierra de Secús.



En el valle de Guarriza poblado desde tiempos lejanos, presenta junto a Oza, al máxima concentración de restos megalíticos de todo el Pirineo Central, y mientras remontamos la pista hacia Aguas Tuertas , podemos ir localizando algunos . Cercano a las ruinas del antiguo cuartel de carabineros, se encuentran 17 cromlechs (monumento megalítico formado por piedras o dólmenes introducidos en el suelo y que adoptan una forma circular o elíptica, cercando un terreno) repartidos en una loma. Luego cercanos al antiguo cuartel de la Mina, varios dolmenes, menhires y cromlechs. Cercanos al Mallo Blanco varios dólmenes al igual que en el Barranco del Barcal. Culminando esta lista con el mas conocido y visitado , el que se encuentra al comienzo del Valle de Aguas Tuertas, junto al la zona de lo Santo, el Dolmen de Aguas Tuertas.Esta excursión de puede convertir en una autentica exploración de monumentos megalíticos.


La pista es de buen circular, va subiendo pausadamente y en todo momento tenemos vista sobre el rio y el fondo del valle. A la altura del Barrando del Barcal, existe un aparcamiento, donde normalmente se deja el vehículo para los que suben hacia el Castillo de Acher o hacia aguas Tuertas. 

A partir de aquí, la pista está en peor estado y una vez pasado el Mallo Blanco y a la altura del Puen de los Chitanos, salva los últimos 100 metros de desnivel con una larga zeta. 





Estamos en el Achar de Aguas Tuertas, a la entrada existe un cubilar, donde se podría pasar la noche y una vez pasado una valla de ganado, bajamos una veintena de metros, para adentrarnos de lleno en el Valle de Aguas Tuertas.


Esatamos en uno de los parajes más bellos de todo el Pirineo: Aguas Tuertas. Recibe este nombre porque el río se retuerce en el fondo de este antiguo valle glaciar. T
iene  unos dos kilómetros de longitud y una anchura de unos 500 m, y aquí se encuentra el nacimiento del Rio Aragón Subordan, que recorre toda la Val d'Echo.




Podemos recorrer todo el valle en la btt, hasta llegar a la zona cercana del  Puerto de Escale que nos conduciría al Ibón de Estanés y también acercarnos hacia el Paso de Escalé, que comunica con el valle francés d'Aspe.


Recomiendo recorrer tranquilamente el valle, bien a pié o en la btt, porque no nos dejará indiferentes.
Y en invierno, hacer la ruta con raquetas o bien con esquís de montaña...no tiene nombre....pero eso ya es otra historia.

El retorno al vehículo lo realizaremos cómodamente y con rapidez, ya que es todo bajada...




Una bonita y asequible ruta, apta para todos los niveles...no dejéis de hacerla.




miércoles, 21 de septiembre de 2016

Le Chemin de la Mâture





Para poder recorrer esta curiosa y espectacular obra de ingeniería humana, nos tendremos que desplazar hasta el Valle d'Aspe Francés, situado en la región de Aquitania, en los Pirineos Atlánticos.
Una vez pasada la frontera, bien por el Puerto de Somport o por el túnel del mismo nombre, a unos 7 km , no encontramos con la población de Urdós y a unos 2 km de la misma, a mano derecha, tendremos a la vista el sorprendente Fort du Portalet


Esta construcción militar , levantada en el lugar que probablemente ocupaba el antiguo peaje medieval de la Puerta de Aspe o Portalet, fue mandada levantar por el rey Luis Felipe I en 1842, y que tenia como fin de neutralizar el camino del Somport en caso de invasión española.



Dos kilómetros mas abajo, a la derecha sale un desvío que cruza el Gave d'Aspe por un puente, el Pont de Gerbes. Nada más cruzar el puente, giramos a la derecha y ahí está el parking en donde podríamos dejar el coche. Pero hay otro parking subiendo un km más adelante en una curva a la izquierda, es más pequeño pero nos ahorra subir por el asfalto. 
Es aquí ,en esta lugar en donde comienza la senda al Chemin de la Mâture . Está  perfectamente indicado con carteles y paneles informativos.










La senda se adentra de lleno el el bosque y después de pasar unas casas hace un giro de 90 º y toma dirección este. Desde este punto tenemos una vista impresionante del Fort du Portalet, apreciando con todo detalle su extensión y las partes que lo conforman. En este lugar estuvo prisionero el Mariscal Pétain, al finalizar la II Guerra Mundial. 



Ahora si ya nos metemos de lleno en el trazado del Chemín de la Mâture y podremos imaginar el duro trabajo que se tuvo que realizar para abrir esta senda en la pared de roca de la Pene de Lamounedere.
El fin del camino venia dado, por la necesidad que a principios del siglo XVIII, tuvo la Armada Francesa de ampliar su flota de navíos, y de buscar la madera necesaria para su construcción.
Para los altos mástiles se precisaban árboles de una talla fuera de lo habitual y era muy difícil encontrarlos. Pero había un valle  en el Bearn, en los Pirineos Atlánticos, en donde contaban que había abetos rectos y muy altos. Sin embargo dicho valle estaba colgado y solo se accedía a él por el estrecho y profundo desfiladero del barranco de Sescoue. Era tal la urgencia que fue necesario tallar un camino en los verticales riscos de acceso al valle. Así, a fuerza de picos y barrenos se creó el espectacular "Chemin de la Mâture" (camino de la madera).



El trazado es espectacular, discurre a unos 150 m sobre el barranco y es mucho mas ancho de lo que apreciábamos desde abajo en la carretera. 





Durante casi un kilómetro, caminamos con comodidad por el sendero abierto en la roca y vamos apreciando el precioso valle que tenemos a bajo nosotros. En esta zona hay numerosas vías de escalada. 
Poco a poco vamos saliendo de la roca y nos vamos adentrando en un precioso bosque mixto con bonitos ejemplares de hayas  y cuando llevamos algo mas de 1 hora y 15 minutos llegamos a las granjas de Perry, que en un sitio agradable para descansar y aprovisionarnos de agua.
Desde aquí podremos volver de nuevo por el mismo itinerario o continuar hacia una bifurcación que nos encontraremos mas adelante y que nos indica Pont des Trungas, nosotros seguimos hacia el  Coll d'Arras. Mas adelante nos encontraremos una segunda bifurcación, es aquí dejamos  el GR 10 que sigue en busca del Refugio d'Ayous, y continuaremos  la senda hacia el Coll d'Arras, al que llegaremos sin ninguna dificultad.
Una vez en el coll, todo el bajada y siguiendo la senda, nos dejará en la pista asfaltada que subimos con el coche. Tomamos la dirección a la izquierda y un kilómetro mas abajo nos encontramos con el parquing de nuestro vehículo.



En total si hacemos el recorrido circular serían unos 18 km con un desnivel positivo de 600 m y unas 4,30 a 5 h de recorrido.



lunes, 19 de septiembre de 2016

El Dedo de Yenefrito ( Panticosa. Pirineo Aragonés)






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Esta particular formación de roca, la podemos visitar en la zona del Valle de la Ripera, lugar cercano a la población de Panticosa. Algunos lo llaman ..." El Dedo de Dios" y su curiosa forma nos señala la proximidad de la Sierra de Tendeñera, enorme muralla de roca que junto con la Sierra Telera, son la puerta de de entrada en el Valle de Tena.



Para acceder a este lugar, el camino mas fácil y bonito sale de el aparcamiento de la estación de esquí de Panticosa. Detrás del edificio de taquillas y telecabina, iniciamos una tranquila senda que discurre paralela al río Bolática. Primero por su margen derecha, para cruzar al otro lado del cauce cuando llevamos recorridos unos 1600 m.



 La senda, con tendencia de subida, es cómoda de caminar y discurre por zonas de vegetación. Su próximidad al río,la hace bastante fresca con lo que se podrá  realizar aun en los meses de mas calor.Una vez en su otra margen orográfica, el  recorrido se hace  mas plano y poco a poco  vamos abandonando la orilla del río.




 El camino se convierte en una estrecha pista y nuevamente en las cercanías del río, lo volvemos a cruzar gracias a  un puente que encontramos a mano izquierda. Si siguiéramos el sendero de la derecha, este nos conduciría a lo largo de todo el valle de la Ripera , hasta el refugio que tiene su nombre.



Una vez atravesado el Puente de la Rata, tenemos que buscar la pista que recorre todo el valle y que sube de la carretera de Panticosa a los Baños. Para llegar a ella o bien seguimos la pista que traemos y  que cruza el puente,  que en unos 350 m se une a la principal, que discurre paralela al río Bolatica, o bien nada mas cruzar el puente , a mano derecha, se intuye un  sendero muy poco marcado,  que sube a su encuentro. Este lugar se puede reconocer ya que está justo al lado de un zócalo rocoso y podemos encontrar algún hito de piedra que lo señala.
Seguimos la pista y casi un kilómetro mas adelante a mano izquierda, nace una senda , marcada con un hito, que se adentra en el barranco de Laulot en busca del Cuello de Yenefrito. También tenemos la opción de continuar la pista unos 400 m mas y tomar un sendero mucho mas ancho y marcado que nos sale a nuestra izquierda.




La senda gana altura con comodidad, delante de nosotros ya tenemos el famoso dedo, que ya no es tan fiero como parecía serlo y observamos que ha perdido su curiosa forma, convirtiéndose en una roca que sobresale de la cresta.






En la cercanía de la base del Dedo, nos encontramos un cruce marcado con pintura roja y naranja que nos da la opción de seguir la ruta hacia el Cuello o desviarnos a la izquierda para contornear la aguja de roca y entrar al Dedo por su vertiente noroeste. Esta opción es mas rápida pero la pendiente es mucho mas acentuada.
La senda hacia el Cuello, sube cómodamente y se acerca al collado por mediación de un par de lazadas.



Una vez en el collado, tomamos el desdibujado sendero que se dirige hacia el norte en busca de la silueta recortada del Dedo. Este en este primer trozo de recorrido, el Dedo no es visible y solo lo tendremos a la vista una vez hayamos superado un trozo de cresta horizontal  que lo une con el collado.
Desde el collado tenemos una visión inmejorable del Pico de Catieras y debajo de su cima podemos adivinar la existencia del ibón que lleva su nombre... de Catieras





Para acceder a la  estrecha y pequeña cumbre de la aguja, tendremos que trepar unos metros y así alcanzar su punto culminante. No es difícil, pero la roca no es de buena calidad y nos exige prestar atención.




Desde su cúspide la vista es impresionante, delante de nosotros podemos ver, Tendeñera, el Pico de las Escuelas, toda la Sierra de Telera, el Pico de Catieras y el macizo de las Argualas, que son los puntos mas característicos que podremos identificar fácilmente en una vista al horizonte.
Al fondo, el la muralla de Tendeñera y justo entre los pico del Forato y el Mallo las Peñas, se aprecia el Forau des Diaples, un enorme agujero que "forada" toda la muralla rocosa y permite pasar de una vertiente a otra. Este lugar, lleno de misterio y enigmas, dio origen a numerosos historias de brujas, demonios y en tiempos lejanos se decía, que era un paso al inframundo. Hoy en día, sigue siendo un lugar poco frecuentado y de difícil acceso.
Tanto el dedo como las inmediaciones de la cresta son un excelente mirador del valle de la Ripera y alrededores de la población de Panticosa.












El retorno lo podremos hacer por el mismo recorrido de la ida, lo que nos permitirá, cambiar la visión sobre el valle y descubrir muchos rincones que la ida se nos habrán pasado por alto.


Ahhh...aviso para  los amantes de las rocas....durante casi todo el recorrido, podreis apreciar cantidad de rocas de diferentes formas y tamaños. El camino esta salpicado, de numerosas rocas de granito metamórfico con nerviaciones, que le han conferido  curiosas formas y dibujos....algunas de ellas incluso presentan caras.

Estas piedras esculpidas y que son producto de la erosión glaciar de antiguos ríos de hielo que cubrían estas montañas, son típicas del Valle de Tena y tienen su máximo exponente en esta zona de Panticosa.